Dentro de un sistema de control de accesos existe otro componente periférico importante, se trata de las Barreras y los Torniquetes que nos van a abrir el acceso bloqueado. Existen las barreras vehiculares que pueden ser de bajo flujo y de alto flujo dependiendo el uso que se les vaya a dar: peaje, perimetral, corporativa, residencial, entre otras. Hay que considerar que la calidad de barrera que se quiera implementar depende de los ciclos diarios, es decir de la cantidad de aperturas que tienen en un día y de la velocidad con la que abrirán y cerrarán un acceso, siendo de 1 segundo las más veloces y 3 segundos o más las que tienen brazos más pesados. El brazo de las barreras puede ser recto o retráctil, con longitudes que deben adaptarse al tamaño del acceso.
Para bloquear o permitir el acceso peatonal existen torniquetes tipo trípode que tienen 3 brazos articulados, uni o bidireccionales, pueden soportar lectoras o integrarse a controles de acceso. Es muy importante que permitan la liberación del brazo en caso de emergencia. Existen torniquetes más estéticos que son llamados abatibles con puertas de cristal templado. Contienen indicadores LED o con pantallas que muestran el status del acceso o de la persona que quiera accesar.
Puertas pivotantes para servicios que requieren un acceso de mayor tamaño. Existen también pilonas o bolardos que funcionan generalmente a través de neumáticos hidráulicos que requieren de la instalación de una cisterna.
Estos dispositivos se integran a un sistema de control de accesos a través de una tarjeta controladora que a su vez estña controlada por el software de Control de Accesos.
